Ivana Nadal estuvo de viaje por México con un grupo de amigas. Allí, a la pareja de Bruno Siri, el exnovio de Nati Jota, le pasó de todo en un aeropuerto mexicano y decidió contar su mala experiencia con la Aduana, mientras viajaba en autobús con una de sus amigas. La conductora de varios programas de Telefé comenzó diciendo a cámara: «No, chicos… no. O sea…», demostrando su decepción por lo sucedido con el picador de marihuana.
La introducción a su mala pasada fue la siguiente: «Está bien que esto era una aventura y que queríamos recorrer el mundo, tipo viviendo cosas que nunca vivieron… No era la idea que nos pare la cana, que me rompan la valija, que perdamos un vuelo por la fiebre amarilla, que pensé que era algo re vintage, que ya no pasaba más…». Ivana Nadal le agregó algo de humor a su relato diciendo: «Como siempre tomando una birra, que es como lo mismo que nada».
Mediante Instagram, donde la modelo tiene más de dos millones y medio de seguidores, amplió la historia de la que nadie quiere formar parte. «Nos paró la Aduana porque tenía un picador. ¿No te parece re dramático?» preguntó a los que verían la historia más tarde. A su vez, aclaró: «No tenía faso, tenía un picador, dos tubitos y mil encendedores. Pero, ¡déjense de joder!».
Segundos más tarde, Ivana Nadal relató que la policía aduanera de México le hizo contar los dólares que llevaba consigo enfrente de ellos, por lo que ella comentó que se puso muy nerviosa. Por este motivo, la presentadora de televisión mostró a cámara marcas de la transpiración en la remera que todavía llevaba.
Afortunadamente, la modelo se lo tomó ligeramente bien luego y definió el hecho como «una anécdota» y reconoció que le devolvieron el picador, si es que a algún seguidor le causaba intriga el desenlace y pudieron salir sin ningún perjuicio del aeropuerto. La policía le preguntó si fumaba y ella contestó: «Sí, es re obvio. Tengo mil encendedores y un picador». El lado positivo para Ivana Nadal fue que no les hicieron desarmar la valija, que cuenta que le cuesta muchísimo armarla.
