Brad Pitt no pudo pasar un mejor cumpleaños. El actor arribó a los 56 años el 18 de diciembre en compañía de tres de sus hijos: Shiloh, de 13, y los mellizos Vivienne y Knox, de 11. Durante el festejo en casa, recibió la visita de los pequeños quienes después fueron recogidos por guardaespaldas para llevarlos de regreso a la casa de Angelina Jolie.
Publicaciones de medios estadounidenses, entre ellos Us Weekly y Entertainment Tonight, señalan que Pitt realizó una fiesta privada con personas allegadas a él. Se conoció que el resto de sus hijos Maddox, Pax y Zahara no estuvieron en la vivienda para saludar a su padre, pero, a pesar de eso, él estuvo feliz por estar al lado de los otros tres.
En la Nochebuena, Brad Pitt prevé estar con Shiloh y los gemelos. «Maddox, Pax y Zahara no tienen pensado estar con su padre en esta festividad pero siempre serán bienvenidos en casa de Pitt», expuso una fuente. Se presume que el hecho de no pasar navidades juntos fue decisión de los niños y no del padre.

«Tienen sus propias tradiciones familiares, comen juntos y se intercambian regalos. Pasan el tiempo juntos y tocan música. Lo más importante para él es que estén todos juntos y disfruten siendo una familia. Está encantado de tenerlos en casa, es lo único que quiere», contó otra fuente con respecto a los planes de diciembre.
«Brad siempre quiere que sea especial para ellos y le encanta ver la emoción en sus ojos». Intenta conseguirles regalos reflexivos y algo para que experimenten. Lo más importante es estar juntos y ser una familia. Está emocionado de verlos y que estén con él en casa. Eso es realmente lo único que quiere», puntualizó el informante.
